23 de mayo de 2007

Sin Tierra



Esta es una pequeña contribución a los que andan hurgando en la cuestión nomadismo/sedentarismo, que acompaña al hombre desde hace tanto tiempo. Ayer me acordé de este libro, (Sin tierra) después de leer la crónica de la mujer sin atributos . Julia Siemers es una actriz y fotógrafa alemana que salió sin rumbo de su país y acabó en España, donde echó raíces. Tiene unos ojos azul celeste y una sonrisa que parecen vinculados de por vida, de forma que al acordarse de ella, esto es la primero que se percibe de su imagen mental. Hace dos años editó este precioso libro de fotografías donde cuenta también su historia brevemente (como buena alemana, la brevedad incluye lo esencial). Empieza con una cita de Apollinaire:

Perdre
mais perdre vraiement
Pour laisser place a la
Trouvaille

(Perder, pero perderlo todo para dejar paso al hallazgo).

A continuación empieza el prólogo, de Cecilia Ceriani:

"Meter lo poco que quepa en algunas maletas, cerrar la puerta de la casa que hemos llamado nuestra, decir adiós a los que amamos desde siempre y arrancar nuestras raíces de esa tierra protectora y referencial provoca un enorme vértigo que puede llegar a llenarnos las noches de insomnio y los días de una hueca incertidumbre.
Todos los que han abandonado su tierra por una razón u otra -en estos tiempos en los que el sentimiento de desarraigo es casi una constante en el ser humano- conocen ese vértigo con el que aprendcen a convivir.. La única forma de combatirlo es desarrollar una enorme fortaleza interior que permita mantener con vida eso que es absolutamente esencial: es decir, lo que cada uno ES o quiere SER". (...)

El libro tiene tres partes: fotografías (piedras, cortezas, paisajes escondidos...), obras con tierras (que fue recogiendo por La Mancha, Extremadura y Portugal) y fotos de tres performances en la naturaleza.

1 comentario:

Marta Sanuy dijo...

Merci guapa, bueno el retrato y estupenda la cita. Te esperamos ansiosas a comer, la Blanca, estupenda cocinera, nos ha preparado algo suculento. Con esta compañia dá igual que llueva